La cordobesa cerró su carrera Panamericana muy cerca del podio.
No eran las circunstancias mas apropiadas para ella. El agua estaba muy fría, lo que siempre le generó inconvenientes a lo largo de su carrera. Los nervios de saber que era la última vez en los Juegos Panamericanos podían jugarle en contra.
Sin embargo, nada de ese la frenó. Nada de eso fue un inconveniente. Cuando la última vuelta promediaba y los 10km se terminaban, Cecilia Biagioli peleaba mano por una medalla. Aunque esta vez el sprint final no le alcanzó para llegar al podio, nada podrá sacarle brillo a otra actuación inolvidable, para quedarse con el cuarto lugar.
Apenas salió del agua, todo era emoción. «Esta vez no pude fueron sus primera palabras», casi pidiendo disculpas.
Después, el análisis siguió, aunque ahora ya más satisfecha por lo realizado: «Fue una carrera muy dura. Me siento feliz de haber podido concretar la carrera y de haber logrado este cuarto puesto que no es nada fácil. Estaba la campeona olímpica, una top 5 de Tokio y una medallista panamericana en fondo. Para mi, es un privilegio estar acá, representando a la selección nuevamente. Es mi quinto y último panamericano. Lo había dicho en Lima, pero se dieron algunas cosas y llegamos hasta acá».
Los que la conocen de cerca saben lo que su entorno cercano significa para ella: «Mi familia es un apoyo incondicional que todo deportista necesita y más siendo mamá. Es bastante complicado ser mamá deportista de alto rendimiento», resaltó casi al borde de las lágrimas.