«Pareciera que hay una gestión nacional que está ciega», evaluó Alesandri

Esta semana se volvió a instalar en Calamuchita el debate sobre la situación actual de la Unidad Turística de Embalse, al cual se sumó el Intendente mayormente afectado por la cuestión, Federico Alesandri. «Esto no es solo el reclamo de este intendente, sino que ya todos los otros que me antecedieron desde el retorno a la democracia, vienen insistiendo en lo mismo. Y fundamentalmente en lo que me toca a mí, con casi 10 años de gestión, ha sido permanente la demanda que hemos tenido con los distintos gobiernos», aclaró la autoridad política.

Y prosiguió: «Pasando en limpio, nuestra preocupación es la de hace un montón de años, agravada por la situación económica, porque la gente no llega a fin de mes y porque los hoteles están prácticamente en estado de abandono». Rememoró se hizo muy difícil con la gestión anterior lograr avances en este sentido, pero directamente con el Gobierno que lleva adelante Macri se ha hecho imposible, dado que evaluó no tienen un plan para nada, y no saben directamente qué hacer. «Pareciera que hay una gestión nacional que está ciega, que no ve, que no entiende que la vida de los embalseños y de los calamuchitanos depende en gran parte del funcionamiento de la Unidad Turística y por supuesto ya no nos duele, ya nos da bronca. Y un día, si esto no mejora, lo que va a generar, perdonando el término, es un quilombo grande. Va a generar tal nivel de provocación que los hoteles estén así, que la gente se va a levantar y va a protestar con violencia porque ya no hay forma de que escuchen», previó.

Puntualmente del estado desastrozo en el que se encuentra la Unidad Turística, el Intendente describió que verla así es triste para los calamuchitanos y que a los embalseños los desgarra. «El estado es de desidia total, sumado a que hace mucho que no se arreglan, que no se mantienen. Y ya, que desde hace prácticamente dos años que no se habitan, que no pasan turistas por esos hoteles, hagamos de cuenta que prácticamente están en ruinas (…) Realmente no sólo da tristeza, da bronca, da impotencia, le da a uno pensar qué carajo hacen los funcionarios nacionales que no trasladan rápidamente eso a los embalseños o al Gobierno de la Provincia de Córdoba, porque nosotros sí sabemos qué hacer. Nosotros podemos seguir destinando hoteles para el turismo social, podemos destinar bungalows para que haya complejos de inversión público-privada, podemos destinar tierras para que haya desarrollo inmobiliario y parques temáticos en la costa del lago en casi 10 o 12 kilómetros que tiene el complejo hotelero sobre el lago más importante que tiene Córdoba. Nosotros sí podríamos destinar otros hoteles de ese complejo como casas de altos estudios porque hay un montón de universidades que les encantaría tener semejantes edificios, usarlos como ciudad universitaria y usar también el complejo polideportivo para las actividades como hoy tienen las mejores universidades del mundo», analizó Alesandri sobre lo que se podría hacer con semejante arquitectura.